Mi primera experiencia como Chef en Australia

Cuando llegué a Australia, me di cuenta de que mi profesión de chef me brindó una entrada rápida al mercado laboral. Esta ventaja, junto con mi habilidad para comunicarme en inglés, me abrió varias puertas que facilitaron mi crecimiento. Llegué a Australia gracias a una amiga que ya vivía aquí. Mis ganas de explorar y el deseo de vivir nuevas experiencias me empujaron a salir de mi zona de confort. Quería trabajar como chef, pero en un contexto distinto al de un restaurante o café en una gran ciudad. Así, buscando experimentar la cultura australiana y sus costumbres en otro marco, y con el objetivo de mejorar mi inglés, me aventuré a mi primer trabajo en Australia: apliqué a oportunidades de empleo en centros de esquí para la temporada de invierno.

Lo que experimenté fue más que simplemente vivir en la montaña durante la temporada de invierno. Mi primera experiencia laboral de invierno, que debía durar 3 meses, se extendió hasta el verano, ya que demostré ser un trabajador confiable y comprometido, así como los latinos. Esto significó estar en la montaña durante dos años consecutivos. Durante este tiempo, no solo conocí la cultura australiana, sino que también aprendí mucho sobre mí mismo, fortalecí mi carácter y abrí mi mente a nuevas oportunidades.

Durante este periodo, mi aprendizaje fue invaluable.

1-Descubrí la importancia del networking, especialmente en un país nuevo.
2-Aprendí a redactar mi currículum según los estándares australianos y a construir y mantener nuevas relaciones.
3-Entendí que la ética laboral de los demás no es mi problema y que centrarme en dar lo mejor de mí mismo me abría puertas.
4-Aprendí a establecer mis límites y a identificar quiénes contribuyen a alcanzar los objetivos.
5-Comprendí que el trabajo en equipo es fundamental y que mostrar el valor que puedo aportar es clave para mejorar mi networking.

Hacer bien las cosas me llevó a más oportunidades.Establecí lazos de confianza con mis superiores, lo que me permitió crecer exponencialmente. Emocionalmente, lo más importante fue aceptar los altos y bajos de esta experiencia. Estar lejos no solo de mi familia y amigos, sino también de la sociedad en una montaña, me permitió descubrirme a mí mismo y eliminar mi miedo a la soledad. Sé que poner en práctica ciertas acciones cuando las emociones están en juego puede no ser fácil. Pero evaluarlas críticamente y seguir creciendo es un aspecto que puede determinar en gran medida si la experiencia en Australia será positiva o negativa.

En mi experiencia laboral como chef, aprendí a:

1-Aprovechar esta experiencia y vivirla al máximo.
2-Entender que siempre será desafiante salir de nuestra zona de confort.
3-Reconocer que solo nosotros tenemos el poder de minimizar nuestros miedos.
4-Ser consciente de todas las cosas que ganamos al salir de nuestro entorno habitual.

¿Qué puede salir mal?